MOVILIZACIONES

La Asociación Afectados Edificio Centro de A Cañiza, creada a raiz del caso Marbar, quiere expresar su malestar ante la actual situación, ya que tras la fuga del constructor Manuel Martinez Barros, hace ya nueve meses, se ha puesto en contacto con diferentes organismos y empresas para intentar regular la situación de sus asociados en cuanto a la luz se refiere.
Aprovechamos así, para reivindicar que desde finales de enero aún no tenemos luz en el edificio, siendo muchos los afectados, entre ellos noventa y cuatro viviendas y seis bajos. Por citar un par de ejemplos, sería el caso de los escriturados, que no pueden ocupar su vivienda eso que ya han pagado todos los permisos (gastos de notario, IVA del inmueble, hipoteca,… ), lo cual nos deja incrédulos porque si legalmente estamos obligados a pagar a hacienda la contribución del piso entendemos que también tenemos derecho a tener luz.
Lo mismo pasa con numerosas familias con contratos privados y llaves en mano, que no pueden acceder a sus viviendas por falta de suministro electrico.
Por eso si me permiten, creo que el titular de esta noticia podría ser: “A parte de burros, apaleados”. Es decir, a parte de la desaparición del dueño de Edificaciones Marbar, que nos causó grandes perjuicios, los organismos institucionales y la empresa suministradora no nos dan una solución a lo de la luz.
Como creemos que hemos sido ya bastante pacientes, les comunicamos la decisión de movilizarnos y como primer acto de protesta, nos encerraremos en el edificio el fin de semana próximo para reivindicar nuestros derechos.
Por eso nos ponemos en contacto con todos los medios de comunicación, autonómicos y nacionales, para que nos ayuden a dar a conocer nuestra situación.

Al juzgado la legalización de pisos (Faro de Vigo)

Otro colectivo afectado por el caso Marbar, también acude al juzgado. La demanda presentada por unos 18 propietarios de viviendas en Aldán (O Morrazo) construidas por el grupo Marbar, ha sido admitida por el juzgado de guardia de Tui. En la sentencia, que se espera conocer en el plazo de unos tres meses, se dará una respuesta a la petición de los afectados cuyos contratos de venta no están firmados, por lo que no pueden legalizar sus viviendas, ni tampoco venderlas. El abogado Carlos Coladas, su representante legal, ha informado que "se presenta la demanda a fin de que la juez eleve a públicos los contratos de venta, mediante su propia firma".

El Juzgado de lo Mercantil recibe la demanda de 20 acreedoras de Marbar (Faro de Vigo,19/04/08)

E l Juzgado de lo Mercantil Número Dos de Pontevedra juzgará la demanda conjunta presentada por unos veinte empresarios acreedores del grupo constructivo Marbar. Piden que se acuerde el nombramiento de una administración concursal que investigue el activo y el pasivo del grupo empresarial deudor, y que proponga un convenio a fin de realizar pagos a los acreedores.El abogado del colectivo, Carlos Coladas que ha presentado los correspondientes poderes para representarlos, informa que el convenio para proceder a los pagos de la deuda, propuesto por la administración concursal que se nombre, supone la aceptación por parte de los empresarios de cobrar un porcentaje de la deuda en un tiempo determinado, hasta un máximo de cinco años, tratando incluso de evitar así la liquidación de Marbar.Los empresarios y sus trabajadores son uno de los colectivos afectados por la situación que atraviesa el grupo Marbar, tras la desaparición de su gerente Manuel Martínez Barros, quien permanece en paradero desconocido desde el pasado día 21 de enero, cuando se comunicó a la plantilla de las empresas el cese de la actividad.Esta incidencia está teniendo especial repercusión en estas empresas proveedoras, a las que el grupo tomiñés adeuda cantidades que rondan los tres millones de euros. Más de trescientas familias de los trabajadores de estas firmas sufren la incertidumbre de una posible reducción de plantilla, dado que muchas de las factorías tenían al grupo como principal cliente.El pasado día 27 de febrero, empresarios y trabajadores de las firmas deudoras salían a la calle, en Tomiño, con el fin de exigir ayuda para mantener los trescientos empleos. En su comunicado se identificaron como "gravemente afectadas por la desaparición del representante de Marbar y el abandono de las funciones de administración; la devolución de los pagarés en curso y el impago de las facturas pendientes".Las deudas reclamadas superan los tres millones de euros, como ya se ha dicho, pero las empresas acreedoras han de seguir haciendo frente a sus correspondientes pagos, salarios y devoluciones.En aquella fecha justificaron que ante su situación no hallaron otra alternativa que la judicial, que ahora avanza. Pidieron entonces a los titulares de Marbar "honradez" en el proceso que se inicia; a los trabajadores, solidaridad con los empleados de las empresas acreedoras; a las entidades financieras reclamaron sensibilidad y un acuerdo que evite el cierre de más empresas.Su petición a la administración es "de tutela y colaboración para afrontar la crisis".

Córtanlle a luz a un edificio da constructora Marbar en A Cañiza

A ver se de esta alguén nos fai caso.

Moi ben comezaron os do Edificio Centro reivindicando o seu dereito a ter luz, sobre todo aqueles que están escriturados e pagan as súas hipotecas.
Se cadra, a empresa Unión Fenosa move os fíos que poida para dar luz a estes pobres veciños, que reunión tras reunión, non conseguiron atopar nada en claro.
E tamén terá que botar man dos "enchufes" o señor alcalde, que para desmentir dase presa pero para axudar... aínda non se sabe nada de él.
Esperemos que estes veciños se reúnan co alcalde para ver se lles pode axudar a ter luz para salvagardar a integridade do edificio.
Ánimo rapaces, que quen non chora non mama; e sen loitar non se consigue nada.

Reportaje a un afectado del Edificio Centro que se mantiene en el anonimato (La Voz de Galicia,18/03/08)

La falta de luz no solo ha cambiado planes de mudanza, también ha echado fuera de sus casas a algunos propietarios que ya vivían en ellas. Con escritura y en la calle. Así se encontró uno de los dueños del edificio centro, que se ha tenido que mudar con su familia a casa de sus suegros. «Es una pena estar pagando un piso en el que no puedo vivir y tener allí todos los muebles sin usar, porque hasta tengo la cocina amueblada», reconoce este afectado, que prefiere mantenerse en el anonimato. Los únicos muebles que todavía no estaban colocados eran los de la habitación de su hija de seis años; aunque ya los tiene pagados, aún no están en la vivienda. La ilusión de esta familia por comprar su primera vivienda se vio truncada cuando desapareció el empresario tomiñés. Pese a que de su piso no desapareció ningún material porque estaba habitado, dejó de poder utilizar el garaje, «que funcionaba cuando me dieron la llave del piso». Además, las zonas comunes han quedado inutilizadas por estar totalmente sin luz. La familia no descarta tener que mantener la carga de la hipoteca y un nuevo alquiler «porque no podemos quedarnos con mis suegros para siempre».

Reportaje de un afectado del Edificio Centro (La Voz de Galicia,18/03/08)

Con 24 años y viviendo de alquiler, comprar un piso en A Cañiza supuso para Rubén Hermida y Lidia Domínguez la solución a sus sueños. Con las llaves en las manos desde las Navidades, este joven y su pareja empezaron a comprar las cosas para trasladarse, deseo que se vio truncado con el corte de luz. «Tuve que volver a casa de mis padres y me da mucho coraje estar pagando los muebles y no usarlos», reconoce este joven. Con cajas en la vivienda familiar y en el piso de A Cañiza, ha tenido que cambiar los planes de montar la cocina. Mientras espera a que el proceso concursal siga su camino, este joven solo desea llegar a un acuerdo con Fenosa para poder trasladarse. Además, también espera poder hablar con los proveedores para recuperar el material que le sustrajeron. «Si cuando esto se solucione van a cobrar por las facturas, tendrán que demostrar que se hizo el trabajo y está colocado todo», recuerda Rubén.

Los dueños de pisos de Marbar no pueden vivir en ellos por falta de luz.(La Voz de Galicia,18/03/08)

Los propietarios pusieron ya denuncias por los telefonillos y contadores robados tras la fuga del tomiñés
Desde la compañía eléctrica se escudan en facturas sin pagar de la constructora tras cortar el suministro los afectados

Como diría el refrán, encima de cornudos, apaleados. A los propietarios de pisos de Marbar les llueve por todos los lados. El último, la luz. La empresa eléctrica ha decidido cortar el suministro aludiendo, según los afectados, a facturas sin pagar del constructor tomiñés fugado. La medida ha dejado a oscuras el edificio centro, que tiene 96 viviendas, por lo que mientras algunos han tenido que modificar sus planes de mudanza, otros se han encontrado de patitas en la calle después de llevar semanas habitando su casa. Para solventar esta situación, en este bloque han creado una asociación que lucha con Industria y Fenosa para conseguir una solución. «En la consellería dieron luz verde pero la empresa da cada día excusas distintas a cada persona que llama a quejarse», apuntan desde la agrupación.
Los propietarios aseguran estar dispuestos a pagar la luz consumida para poder vivir pero exigen que mientras dure el proceso concursal y se solucionen las deudas del empresario fugado, ellos pueda acceder a sus viviendas. «Algunos se han ido a junto de familiares mientras tanto y otros se han buscado la vida, pero no todos se pueden permitir pagar a la vez una hipoteca y un alquiler», reconoce el presidente de la asociación.
Mientras mantienen conversaciones por el tema de la electricidad, también se han puesto en contacto con las empresas suministradoras que supuestamente robaron material tras la fuga de Barros. Algunos de ellos han presentado ya denuncia ante la Guardia Civil por la falta de cuadros de la luz en zonas comunes y telefonillos o radiadores en algunas viviendas. Pese a ello, no descartan presentar otra queja conjunta para ejercer más presión. Como primera medida, la asociación del edificio centro ha querido dar a conocer su situación colgando pancartas en los balcones del edificio. Con la esperanza de tener una solución, en las próximas semanas planean reunirse también con el gobierno local y otras administraciones.